Recordando al petrolero Prestige
En 2003 y 2004 Principia llevó a cabo 11 proyectos con una fuerte componente de simulación, en relación con el petrolero Prestige.
Leer más02-09-2020 | Publicado por Joaquín Martí
El crecimiento de la población mundial y de su nivel de vida, con el desarrollo de nuevas infraestructuras que conlleva, está dando lugar a un fuerte incremento en el número y escala de los proyectos de ingeniería civil en el mundo. Como se menciona en “Capital Project and Infrastructure Spending: Outlook to 2025”, publicado por PricewaterhouseCoopers (PwC), se espera que para 2025 el gasto mundial en infraestructuras supere los 9 billones de US$ por año, más del doble de los 4 billones de 2012. Esto es especialmente notorio en China, Oriente Medio y algunos países de Latinoamérica.
En el pasado, los gobiernos iniciaban casi todos los proyectos de infraestructuras. Sin embargo, a medida que sus presupuestos van siendo más ajustados, hay un número creciente de empresas privadas que participan bajo el formato de Public-Private Partnerships (PPP). Estas empresas privadas miran con especial cuidado la eficiencia y rentabilidad de la inversión, tanto en el proyecto como en la construcción.
Esto implica nuevas formas de proyectar infraestructuras en general y puentes en particular.
Aparte de que el producto satisfaga todos los requisitos, el proyecto y construcción deben contar con otros factores, como la rapidez, coste, trazabilidad, sensibilidad a problemas detectados o condiciones cambiantes, capacidad de incorporar a múltiples participantes y equipos de proyecto dispersos. En otras palabras, se necesita un BIM (Building Information Modelling) y una plataforma colaborativa.
A pesar de que la utilización de un BIM supone introducir nuevas formas de trabajo, lo que puede inicialmente generar conflictos y atascos mientras se reconfiguran los procesos, todas aquellas empresas en el ámbito del desarrollo de infraestructuras, y especialmente infraestructuras singulares, son conscientes de que lo necesitan si quieren diferenciarse y seguir siendo competitivas. Y aunque hay otras propuestas en el mercado, que incluso llegaron antes y son consideradas las referencias actuales, nosotros apostamos por el potencial que ofrece la plataforma 3DEXPERIENCE de Dassault Systèmes. El mercado asiático, donde se encuentran desde hace algunos años los mayores retos en infraestructuras, percibió su potencial y la adoptó. Y no hay duda de que el resto de los continentes también lo hará.
Las ventajas básicas de un BIM son permitir un diseño en 3D colaborativo y facilitar la comunicación por medio de formatos estandarizados de datos. En la fase de diseño conceptual, el software permite que el diseñador cree rápidamente unas curvas complejas para definir el esqueleto de la obra, incluso los soportes, por medio de una tableta de diseño. Creado el esqueleto, la librería de componentes es esencial para proyectar.
Estos componentes (pilares, vigas, etc.) son objetos paramétricos inteligentes, que tienen sus propias reglas y están perfectamente categorizados. Los diseñadores seleccionan los componentes deseados y los ubican en el esqueleto; los componentes ajustan su tamaño automáticamente siguiendo el esqueleto para generar el modelo BIM de forma coordinada. Si el diseñador modifica el esqueleto, eso hace que todos los componentes se actualicen, con el consiguiente ahorro de tiempo.
Se pueden hacer animaciones del diseño, más funcionales que los dibujos estáticos que se usaban antes. Durante la preparación de los planos de construcción, el software puede comprobar si existen conflictos o errores de diseño. Los usuarios introducen sus medidas para llevar a cabo análisis y optimizar la construcción. Todas estas verificaciones adicionales son de enorme importancia en el proyecto y construcción de puentes. Por otra parte, el software simplifica la introducción de cambios en el diseño, una actividad que en el pasado podía consumir incluso más tiempo que el diseño original.
La cuestión no es si te beneficiarás de todas estas ventajas, sino cuándo lo harás. ¿No deberías hacerlo ya?